Daniela Rojas.

8 octubre, 2013

“Esta danza no sea solo un show de televisión, si no que algo que uno puede aprender de a poco a amar y querer en todos sus aspectos, es un estilo de vida”.

“Como toda niña de 12 años, pequeña y caprichosa, miraba a Shakira y decía, ella no baila tan bien”.

Así comienza la historia de Daniela Rojas de 22 años y su unión con la Danza Árabe. Ella pensaba que podía bailar mejor que la cantante colombiana y por ello, hizo ingreso a un curso de Danza Árabe.

Tras su ingreso, descubrió un mundo distinto, el cual la hizo dejar los caprichos y orgullo de lado y comenzar a ver el lado humilde y folclórico de lo que es este baile.

Ya a sus cortos 12 años, inició su recorrido por distintas escuelas de baile donde aprendió técnicas de profesores internacionales y nacionales. Hoy, sigue perfeccionándose para llegar a ser una danzarina profesional y con ello, llegar a ser una persona integra en todo sentido.

¿Recuerdas la primera vez que bailaste?

La primera vez que bailé en una presentación yo tenía 14 años y fue en el Centro Cultural de Macul, esto entre el 2004 ó 2005, por ahí. Disfruté todo el momento que estuve sobre el escenario, para ser mi primera presentación, no fue estresante, para nada.

¿Cuál es el momento más feliz que te ha entregado la danza?

La aceptación del proyecto para formar un taller acá en Colina.

Es un proceso de años, donde vine a hablar a la municipalidad para que se abriera la posibilidad de hacer unos cursos. Estuve por lo menos dos años trabajando en ello y cuando me dijeron, “estás lista, acércate al centro cultural y se abre tu curso de danza árabe”, yo creo que ese momento es el más feliz en lo que va de mi historia ligada al baile. Poder enseñar esta linda danza a los niños y jóvenes de mi comuna a sido el mejor logro que he obtenido hasta ahora.

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¿En quién pensaste cuando decidiste enseñar este baile?

En todas las mujeres de Colina. Partí haciendo cursos para niñas de 4 años hasta mujeres adultas mayores y ahora realizo cursos a alumnas con discapacidad intelectual, entonces si me preguntas ¿”en quien pensé al momento de comenzar el proyecto”? pensé en toda mujer, independiente de la edad, que quisiera pasar un momento grato, pues nuestro curso está fundado sobre las bases de la entretención, educación, compañerismo, valores, sensualidad, y vida sana. Es un curso muy integral, la idea es que la persona que ingresa logre esa integridad en todos ámbito.

Para ti, qué requisito debe tener una mujer para bailar a la perfección la danza árabe

Perseverancia, mucha humildad para escuchar las falencias, pues me han tocado niñas que llegan diciendo que saben bailar muy bien, y demuestran una arrogancia a la hora de tener que aprender y eso no es bueno, pues la idea es ver dónde se está equivocada para así poder ir superándose y profesionalizándose con el tiempo.

Siempre les digo a mis alumnas que esto no es un curso donde se estudia dos o tres años y listo, ¡ya soy profesora de danza árabe!. Yo todavía sigo estudiando y cada año, las que somos profesoras tenemos que seguir tomando cursos.

¿Tu familia te apoya?

Mi familia me apoya en todo, cuando era más pequeña, andaba toda mi familia atrás mío apoyando y acompañándome, y a pesar de los años que han pasado, aún me sigue ayudando.

En los eventos que realizamos acá, en el centro cultural de Colina, mi padre anima y mi madre colabora anotando los trajes, hasta mi hermano coopera con este bonito baile.

¿Donde estudias actualmente?

Estudio en la academia oriental cerca de metro salvador, donde tome un curso que es una vez al mes, pero todo el día.

Cuéntanos un poco de este baile en referencia al hombre

En el folclor árabe y en el mundo de la gente Árabe que vive en chile, el hombre también baila esta danza, sin embargo no es el área de la sensualidad el que desarrolla como lo hace la mujer, los hombres bailan con un bastón pues cuenta la historia que eran pastores y cuando los varones salían de pastoreaban moviendo el bastón, de ahí nace esta alegría de los hombres del movimiento, los cantos, meneando los hombros y dando saltitos.

Ahora bien, hoy en día se da que los hombres que se dedican a la danza, hacen una improvisación como lo hace una bailarina, con unos faldones, pero esto es otra área, algo así como estilo moderno de la danza árabe que realizan algunos hombres.

¿Qué opinas tú del papel que juega el hombre dentro del baile?

Es importante que los hombres en Chile se atrevan a bailar esta danza. Se ve casi siempre a la mujer danzando y parece que los hombre no tienen interés, pero su baile es muy bonito.

Dentro de las ideas para fin de año, es integrar a varones a nuestra obra de finalización, la idea es que haya una presencia masculina en el baile estilo folclórico, sería muy interesante que se bailara en conjunto. En otros lugares, al baile se le agrega un percusionista que le suma de su goce junto con la bailarina, y así se puede realizar show totalmente completo.

¿Cuál es tu referente en la danza árabe Chilena?

Si; chilena. Mi profesora Marua, ese es su nombre artístico, ella sigue la misma línea a la que yo pretendo algún día llegar, que es una danza integradora desde todo los ámbitos, que no es solo danza, si no un complemento de cultura, salud, abarca todos los puntos necesarios que tenemos que aprender a visualizar como mujeres, no solamente decir ¡ yo bailo danza árabe! Si no que tu bailas danza árabe pero sabes que musculo estás utilizando, sabes de movimientos, sabes que este paso puede hacerte daño si no lo haces bien.

Sabe de medicina, de música, de tocar instrumentos, y de todos los ámbitos, ella es mi referente actual.

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¿Qué esperas como profesora, lograr en tus alumnos?.

Profesionalismo, yo creo que eso es lo primero, pues la meta que tenia era tener grupo de niños con valores, con respeto con amistad entre ellos, y eso se ha logrado. Desde la primera clase hemos formado unos grupos muy ricos y cariñosos y mi meta es que ellas lleguen a esta profesionalización, y que digan siempre voy a estar aprendiendo, no a que digan ¡aquí yo aprendí lo máximo!, mejor que tengan siempre esa humildad de seguir amando y queriendo aprender esta danza.

Más que una danza, ¿describirías el baile como un sentimiento?

Yo diría un estilo de vida totalmente, porque al escuchar la música te relaja, te alegra, te lleva a muchas perspectivas alegres, este baile va mas allá que moverse ante un público, es un goce primero personal.

Cuéntanos sobre el vestuario que se utiliza en esta danza árabe

Hay distintos tipos de danza árabe y esos tipos se da por los lugares geográficos, por ejemplo en los lugares que hay más desierto, las mujeres están más tapadas por el golpe de la arena en sus rostros y cuerpo o los lugares que son más abiertos, por el mismo calor, usaban ropas más sueltas.

¿Crees que existe un tope de edad para bailar esta danza?

Para mí no hay tope, yo he compartido seminarios con mujeres de avanzada edad.

Por ejemplo, una bailarina que es chilena y tiene sus añitos, es Teresa Saba, ella tiene sus años pero baila muy bien, entonces más que nada es no tener condiciones físicas que puedan impedir hacer los movimientos, pero para mí no hay edad para seguir bailando.

Como profesora, qué legado te gustaría dejar en tus alumnas.

¿Que legados quieres dejar al partir?

Yo creo que me gustaría que no olvidaran que la profesora les enseño a amarse a ellas mismas, que amen a sus compañeras, que sigan fomentando el respeto en ellas y las demás y el amor por esta danza, que esta danza no sea solo un show de televisión, si no que algo que uno puede aprender de a poco, amarla y quererla en todos sus aspectos, como el histórico de show, de reunión, etc, eso me gustaría que las alumnas recordaran de mi.

Cuéntame de los talleres

Este semestre tenemos 3 cursos.

Los días viernes tenemos el proyectos con las niñas del colegio Uncalem, que son niñas con discapacidad intelectual y síndrome de down.

Los días sábados tengo dos niveles de danza árabe: unas niñas que llevan un año y medio tomando clases y otras que iniciaron este año, en total somos 34 que están tomando los talleres.

Ellas tienen su tiempo de calentamiento, aprender pasos, coreografías, trabajos en grupo y de relajación.

Finalmente cada semestre se realiza nuestra presentación, y tenemos un proyecto para este fin de semestre; realizar un tipo musical de danza árabe.

Acá en el centro cultural siempre hay disponibilidad para todo, desde los guardias hasta la señora del aseo. Si tengo cualquier problema, ellos al tiro me ayudan a solucionarlo.

Además los espacios que tenemos son de muy buena calidad, sala con espejos, escenarios e iluminación hacen excelente el trabajo de enseñanza, creo que estamos muy bien equipados.

Le agradezco al alcalde por el compromiso con nosotros, pues siempre asiste a nuestras presentaciones, nos apoya y entrega palabras de aliento, estoy muy contenta de tener un alcalde que promueva esto.

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Un mensaje para quienes aun no se deciden a bailar danza árabe.

Que pierdan el miedo y la vergüenza a la gente y a ellas mismas, creen que los van a juzgar por hacer algo que les gusta por quizá ser un poco gordita o de avanzada edad, o sea si tienen buena salud y les gusta, háganlo, pues es un bien y gusto personal, regálense ese momento de tener amigas, de danzar y disfrutar esa danza, no prepararlo tanto para un show, si no hacerlo un estilo de vida propio.

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